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La importancia de cuidar la salud oral en las personas mayores

La importancia de cuidar la salud oral en las personas mayores

La salud de los mayores de hoy no es la misma de hace treinta años y su dentadura tampoco. Según las estimaciones del Consejo General de Dentistas, el 97% de los adultos de entre 65 y 74 años ha perdido, al menos, un diente y el 60% padece una pérdida dental severa, es decir, viven con menos de 20 piezas. Teniendo en cuenta estos datos, podemos deducir la importancia de cuidar la salud oral en las personas mayores.

Representan un sector de la población que necesita una atención diferente, unos protocolos adaptados a sus necesidades. Cada vez tenemos una población más envejecida, que está, además, polimedicada. Por lo tanto, requieren una atención mucho más específica y personalizada. Cabe recordar que una deficiente salud bucodental es un desencadenante de otras complicaciones sanitarias. La pérdida dentaria, por ejemplo, disminuye la salivación y provoca problemas para deglutir que favorecen la desnutrición de las personas mayores. Y también tiene un impacto en su salud mental, pues contribuye, especialmente en las mujeres, a su aislamiento social por inseguridad, vergüenza y depresión, un trastorno que afecta a casi uno de cada cuatro mayores.

Problemas de salud oral más frecuentes en las personas mayores

La salud oral de las personas de la tercera edad requiere, como comentamos, una atención especial. Presentan patologías y trastornos bucales relacionados con la edad, pero también con sus hábitos de vida y con el cuidado y la higiene bucodental. Estos son los problemas de salud oral más frecuentes en las personas mayores:

    • Edentulismo. Es la pérdida total o parcial de las piezas dentales definitivas y como explicamos antes es uno de los problemas más comunes de la población mayor. Puede ser consecuencia del proceso de envejecimiento, pero también puede estar relacionada con una deficiente higiene bucodental, tabaquismo, otras enfermedades no controladas, caries, periodontitis… Afecta a la estética, pero también tiene repercusiones más graves al repercutir en la capacidad para masticar y hablar. Pero, además, puede causar el desplazamiento de otras piezas dentales e incluso una modificación de la estructura facial.
    • Caries radicular. A medida que envejecemos, aumenta la propensión a desarrollar caries radicular, que se originan cuando la raíz de los dientes está expuesta a los ácidos de la placa bacteriana. Una de las causas más comunes es la sequedad bucal, que en las personas mayores suele aparecer como consecuencia de la medicación que toman para otras enfermedades y patologías como la hipertensión, el colesterol, el dolor, el párkinson… De ahí la importancia de acudir a una revisión odontológica con periodicidad, para poder prevenir la aparición de las caries aliviando los síntomas de la sequedad bucal o empleando, por ejemplo, esmalte de flúor para proteger los dientes.
    • Enfermedad periodontal. Afecta a los tejidos de soporte de los dientes: encías, ligamento periodontal, hueso alveolar… Puede manifestarse de dos formas: gingivitis y periodontitis. La primera es la más común y causa la inflamación, enrojecimiento y sangrado de las encías, especialmente durante el cepillado. Si no se trata a tiempo, deriva en una periodontitis, llegando a dañar el hueso alveolar y causando la caída de la pieza dental. Una vez más, la prevención y las visitas periódicas al dentista son fundamentales para evitar este problema, relacionado con una mala higiene, tabaquismo, diabetes, osteoporosis…
    • Candidiasis bucal. Las personas mayores que usan prótesis y tienen una higiene bucodental deficiente son más propensas a desarrollar una candidiasis bucal o infección por hongos en la mucosa bucal. Suele presentarse con más frecuencia en aquellas personas que padecen diabetes, xerostomía o sequedad bucal, leucemia o que reciben tratamientos con corticoides o como la quimioterapia. Aunque no es una enfermedad grave en sí misma, sí que es importante tratarla a tiempo para evitar consecuencias más graves como una candidiasis esofágica o sistémica.
    • Cáncer oral. Cada año se detectan en nuestro país unos 7.000 casos de cáncer oral, de los que tan solo el 25% se diagnostican de forma precoz. Esto se debe a que los síntomas pasan a menudo desapercibidos. Uno de los más habituales es la aparición frecuente de lesiones y úlceras que tardan en sanar más tiempo del esperado. Las personas mayores tienen más predisposición a sufrir un cáncer de la cavidad bucal debido, entre otras cosas, a la respuesta inflamatoria del organismo, que se incrementa durante el proceso natural del envejecimiento.

La importancia de cuidar la salud oral en las personas mayores queda patente en los graves riesgos que puede entrañar para su salud general un problema bucodental. La prevención juega un papel fundamental en estos casos, desde las revisiones odontológicas periódicas hasta el mantenimiento de una adecuada higiene bucodental, especialmente cuando se usan prótesis.